Cómo planificarse para devolver un préstamo sin problemas

Publicado por o día 05/08/2019 na sección de Economía

Cómo planificarse para devolver un préstamo sin problemas

Para las entidades financieras, la experiencia del consumidor con productos de financiación es un factor decisivo a la hora de decidir el tipo de interés que se aplicará a dicho consumidor. De hecho, en algunos casos puede incluso ser el pequeño detalle que haga que la balanza se desequilibre hacia el lado de la aceptación o el rechazo.

Esto se debe a que los consumidores que ya han tenido préstamos y créditos y los han devuelto con solvencia, han demostrado saber planificarse y gestionar su dinero. Por mucho que cobren comisiones por los retrasos e impagos, a las entidades no les interesan los morosos.

Por eso, hemos acudido a LoanScouter.com para que nos informen sobre la mejor manera de planificarse a la hora de devolver un préstamo y no tener problemas de liquidez.

1 Calcula tus el dinero que puedes dedicar a devolver el préstamo

Aunque la entidad financiera vaya a hacer sus propios cálculos, no está demás que nosotros mismos los hagamos antes. 

Este paso es tan sencillo como coger papel y lápiz o una hoja de cálculo en tu ordenador y poner los ingresos que tienes.

A continuación, resta los gastos regulares. Esto no se limita a las facturas del gas, agua, etc. También debes incluir el dinero que gastes de media en comida, ocio y demás pequeños gastos que en su conjunto pueden suponer un buen pico.

La cantidad sobrante, que en condiciones normales es tu capacidad de ahorro, es la que en principio te podrías permitir devolver cada mes sin tener problemas de liquidez. Pero como es mejor ser precavido, lo mejor es restarle un 25 % a esa cantidad por lo que pueda pasar.

Si la cuota de tu futuro préstamo es superior a la cantidad que obtengas, seguramente el préstamo no sea buena opción, incluso aunque haya una entidad dispuesta a concederlo.

2 Limita el uso del dinero del préstamo

Un error habitual de muchos consumidores que acaban teniendo problemas con el préstamo es gastar el dinero en otra cosa. Cuando uno ve el dinero disponible en el banco, es tentador ir a cenar un restaurante, comprarse un pequeño capricho y hacer algún otro exceso. Pequeños gastos que cuando se suman, pueden suponer una buena cantidad. Si se gastan en estas cosas, luego el dinero no estará disponible para lo que se pidió el préstamo.

En definitiva, aunque parezca una obviedad, hay que tener muy claro para qué se pide el dinero y solo utilizarlo para eso.

3 Ahorra un poco mientras pagas el préstamo

En el punto 1, recomendábamos que se guardase un 25 % de tu capacidad de ahorro. Lo ideal es guardar ese dinero en liquidez. Es decir, no invertirlo sino tenerlo disponible hasta que devolvamos el préstamo. De esta manera, si ocurre algo imprevisto, tendrás un pequeño colchón para poder pagarlo sin que afecte a tu capacidad de devolver el préstamo.

4 Pide la cantidad justa

Cuando se pide un préstamo puede ser tentador pedir un poco más para algún capricho, pero no es buena idea. Igual que si vas al cine con tu pareja no compras tres entradas, cuando pides un préstamo solo debes pedir lo que necesitas.