Los sindicatos de la Policía Nacional de referencia en Galicia, Confederación Española de Policía –CEP-, Justica Policial –JUPOL-, y Alternativa Sindical de Policía –ASP-, conocidos por su carácter reivindicativo y por ser los mayoritarios en muchas de las dependencias policiales de la comunidad gallega solicitan formalmente “el reemplazo” de la Subdelegada del Gobierno de Pontevedra, Maica Larriba, y el cese del jefe policial de la comisaría de la Policía Nacional de Vilagarcía, Luis Hombreiro, por faltar a la verdad y su desastrosa gestión en un aspecto tan grave como es la seguridad de los ciudadanos.
Los sindicatos policiales han tomado esta decisión ante los últimos datos estadísticos del Ministerio del Interior sobre la criminalidad en la localidad de Vilagarcía, una situación que califican de insostenible ante la mala gestión de su jefatura y el maquillaje llevado a cabo desde la Subdelegación para tapar los datos reales.
Señalan que la diferencia entre los sindicatos policiales y los protagonistas de esta historia, la subdelegada del Gobierno y el actual jefe de la plantilla policial de Villagarcía, es que ellos dejan la afición a la lectura fantástica a un lado para aportar unos datos que demuestran el deterioro de la seguridad ciudadana y la mala gestión de ambos, poniendo en peligro a personas en pro de “mantener sus sentaderas a buen resguardo vendiendo humo”, no dudando para ello de hacer uso de las redes sociales de las instituciones del Estado en Galicia.
Y es que, el 12 de Julio, como si de un photocall se tratara y como fue recogido en el Twitter de la Delegación del Gobierno en Galicia, la Sra. Subdelegada hizo acto de presencia en Vilagarcía, donde vendió las bondades del trabajo realizado por el Jefe policial, y agradeciendo la bajada de los índices de delitos contra la seguridad ciudadana en la ciudad”, remarcan desde los sindicatos policiales.
Pero nada más lejos de la realidad, y es que los seis primeros meses de este año 2022 la criminalidad y los delitos han aumentado un 22,3% en Vilagarcía respecto al mismo periodo del año pasado.
En definitiva, el número de infracciones penales registradas en Vilagarcía de Arousa en el periodo comprendido entre enero y junio de 2022 consolida un deterioro considerable de la seguridad ciudadana, con un aumento de delitos que sigue estando por encima de los registrados en 2021.
Por tipologías delictivas, los incrementos más preocupantes durante los seis primeros meses del año, por la alarma social que generan y su impacto en la sensación subjetiva de seguridad que perciben los ciudadanos, se han centrado en los robos con fuerza en domicilios y establecimientos (que se han disparado un 52,4%, empujados por el considerable incremento del 33,3% de los robos con fuerza en domicilios) y en los hurtos (con un aumento del 26,1%).
Pero además, también ha habido incrementos muy significativos en los delitos contra la libertad e indemnidad sexual (+100%), tráfico de drogas (+350%), así como delitos graves y menos graves de lesiones y riña tumultuaria (+12,5%).
En términos absolutos, en el primer semestre de 2022 se han registrado 958 infracciones penales frente a las 783 del mismo periodo de 2021. Esta es la cifra más alta en siete años y la segunda más cercana de todo ese periodo (primer semestre de 2019) es inferior a la ahora registrada en un 17,11% por lo que Vilagarcía de Arousa está muy por encima ya de los niveles delincuenciales prepandémicos.
Este es el desglose del número de infracciones penales correspondientes al periodo enero a junio de los últimos años, 691 infracciones penales en el primer semestre del año 2020, 818 infracciones en el mismo periodo de 2019, 764 infracciones si tomamos como referencia los seis primeros meses de 2018, 707 en ese periodo de 2017, y 671 si vemos el año 2016, una evolución en ascenso que señalan la mala gestión de Maica Larriba y Luis Hombreiro y dan la razón a los sindicatos policiales a los que la Subdelegada no quiso escuchar.
Por otra parte, y centrando el análisis de la criminalidad de este municipio en ese periodo histórico (2016-2022), se han producido las siguientes tendencias:
Este año, 2022, va camino de superar con creces 2021, el peor año de todos en cuanto a criminalidad, con 1.737 infracciones penales. Esa es la mayor cifra registrada en los siete años. Es tan llamativamente elevada que ese aumento ni siquiera se corresponde con el regreso a parámetros delictivos prepandémicos -recordemos que la criminalidad se desplomó en 2020 por el estado de alarma y el confinamiento- ya que ese dato supera a los de todos los años previos a la existencia de la Covid-19 (periodo 2016-2019).
Por otra parte, la cifra total anual de infracciones penales (exceptuando 2020 por los motivos de salud pública ya citados) nunca ha estado tan alta como ahora. A las 1.679 de 2019 (que ya era una cifra inédita, por mala) le ha superado ampliamente las 1.737 de 2021 (nuevo récord) y un resultado en el primer trimestre de 2022 que es el peor en muchos años.
Hay que recordar que el actual jefe de la Comisaría, el Sr. Luis Hombreiro, fue nombrado por la DGP en agosto de 2021, por lo que sería achacable a su periodo de gestión tanto la nefasta cifra final de ese año como la que se está produciendo ya en 2022.
Los 958 delitos contabilizados en el primer semestre de 2022 representan el 55,15% del total de las registradas en todo 2021. Eso significa que, de seguir la tendencia, este año se cerrará con cifras incluso superiores a las del año pasado, volviendo a ser un récord negativo en cuanto al deterioro de la seguridad ciudadana en el municipio.
Tanto en 2021 como en el primer semestre de 2022 la criminalidad de Vilagarcía de Arousa ha experimentado deterioros de una entidad significativa.
Unos malos datos debido a la mala gestión de una plantilla experimentada y profesional.
Los efectivos uniformados de atención al ciudadano de la policía nacional, más conocidos como radiopatrullas, son la pieza fundamental sobre la que trabaja la Policía Nacional, no sólo son su imagen, si no que la labor que realizan tanto en la prevención de delitos como en su represión son fundamentales para mantener a raya la delincuencia de una localidad, y la mala gestión de estos en Vilagarcía ha puesto en jaque tanto a sus componentes como la labor encomiable y fundamental que desempeñan.
ASP, JUPOL y CEP representan a nueve de cada diez de estos agentes de atención al ciudadano en la localidad de Vilagarcía de Arousa, una plantilla experimentada, profesional y que hasta la llegada del jefe policial actual había mantenido a raya a la delincuencia de la ciudad de mano de las anteriores jefaturas.
La postura de estos tres sindicatos, JUPOL, CEP y ASP, no es fruto del capricho, viene abalada por unas cifras del Ministerio del Interior que señalan que desde la llegada del jefe policial actual de la comisaría de Vilagarcía la delincuencia en vez de bajar, como señaló en su día la Subdelegada del Gobierno como la tendencia anterior, no ha dejado de crecer en sobremanera, lo que consideran que es sólo fruto de su mala gestión y de una redistribución de la plantilla sin lógica alguna que ha perjudicado a la misma y a los ciudadanos a los que se deben, de ahí que con sentido de responsabilidad soliciten el cese inmediato de la jefatura actual de estas dependencias policiales, habiendo cursado ya escritos al respecto al Consejo de la Policía, al Director Adjunto Operativo (Jefe máximo de carácter policial dentro de la institución policial), al Jefe Superior de Galicia y al Jefe Provincial.
En contraposición de lo que afirmaba Joseph Fouché: “Para ser un buen investigador criminal hay que ser en potencia un buen criminal”, para ser un buen gestor no hay que actuar como un elefante en una cacharrería; si no que hay que analizar y hacer autocrítica, y más cuando se dispone de una plantilla policial ejemplar y experimentada en seguridad ciudadana, y gracias a la cual todos estos años anteriores han mantenido a la delincuencia a raya.